El mentir es un maldito vivir. Nosotros no somos hombres, ni vivimos unidos los unos con los otros sino con la palabra; si llegásemos a conocer el horror y el peso de este vicio, le declararíamos la guerra a sangre y fuego con más ardor y justicia que a todos los demás crímenes.
Montaigne
Sigue este link y conoce la opinión de
Vaya, pues yo soy una gran defensora de la mentira "bien utilizada", eso sí. Vamos, que ni la verdad es tan maravillosa, ni la mentira tan horrible; depende de en qué manos caiga una u otra...Es como un cuchillo, que puede servir para pelar fruta ...o para matar.
ResponderEliminarUn gran abrazo, Ro!!!
Mercedes: Pues mira, hasta hace no mucho este tema de la mentira me tenía sin pendiente; pero cuando mi vida se ha visto atrapada en una gran y asquerosa mentira... eso ya ha sido digno de echar una mirada. Todos los puntos de vista son validos, así como las consecuencias de las elecciones de decir la verdad o mentir, eso incluye omisiones, verdades a medias y mentiras por todo lo alto...
ResponderEliminarLa analogía del cuchillo es acertada, digamos que esta vez me lo han clavado en la espalda, cuando podía haber sido utilizado para cortar sana, fina y certeramente algo que estaba de más. Ni hablar, por eso menciono lo de hacerse cargo (responsable) de las elecciones -del uso- que decidiste dar al cuchillo.
Aunque…creo que es mucho pedir de mi parte, quien miente ha decidido engañarse a si mismo antes que a nadie, entonces: ¿por qué pido que sea responsable?
Pues eso que el que a hierro mata…
Vaya me has puesto a filosofar, creo que Montaigne estará complacido.
Gracias amiga, te abrazo.
Ro
Me encanto tu espacio !!!
ResponderEliminarFelicitaciones.Es placentero.
Saluda ,Liliana
Liliana Lucki: Gracias por tus palabras; mis dos blogs son un espacio con un poquito de todo, un espacio para ti.
ResponderEliminarTe abrazo
Ro